Se cumplen 30 años del arribo de Steve Washington al Chaco

Hoy se cumplen 30 años del arribo a Resistencia del norteamericano Steve Washington, el primer basquetbolista extranjero que se sumó a las filas de Villa San Martín para después desarrollar una exitosa carrera por numerosas entidades de la provincia, de la región y países vecinos. El 5 de marzo de 1980 pisó suelo chaqueño y produjo un gran revuelo en el medio deportivo, sin pensar que su incorporación y la de sus compatriotas que llegaron al poco tiempo sería factor de uno de los grandes cambios que tuvo el baloncesto con la creación de la Liga Nacional.
Steve Washington llegó junto al técnico y representante Bobby Star, un personaje que también se ganó el afecto de los aficionados, y a los tres meses se sumó Marvin Jackson, otro jugador de jerarquía e imponente que desplegaba su calidad en los partidos disputados a estadio lleno. Julius Haward y Marc Holmes se incorporaron a Hindú, Douglas Logrucilla a For Ever, Stanley Steve Schaleg a Regatas, Stanley Jackson, un jugador que marcó la diferencia, y Eduardo Scheridan a Don Orione, y más adelante Marcus Adams, quien hoy reside en Estados Unidos.
Precisamente en esa época quedó inaugurada la llegada de extranjeros a esta parte del país porque en Buenos Aires ya había varios que se encontraban jugando en reconocidos equipos. ‘‘Fue algo muy diferente en mi vida porque provine de la Universidad de Oklahoma donde me preparé para Asistente Social; con 25 años llegué al Chaco, un lugar desconocido en el que me esperaban con los brazos abiertos y al grito de Negro me dieron la bienvenida. Lo sentí en todo momento que lo hacían con cariño, no con bronca ni con tono despectivo, jamás me sentí discriminado” aseguró el destacado exponente que paseó su calidad por Villa, Alvear de Corrientes, Cosecha, Villa Castañeda de Jujuy, Unión Progresista de Villa Angela, Social Las Breñas, Hindú Club, Pinedo Central, Olimpia y Coronel Oviedo de Paraguay.
‘‘Nunca pensé que me iba a radicar acá, pero fueron varios los motivos que me llevaron a quedarme. Primero, Carlos Freschi cuando tramitó mi ciudadanía argentina para que jugara más tiempo aquí. Llegué en tiempos en que gobernaban los militares, reinaba la paz y tranquilidad, cosa que no tenía en Chicago donde vivía, y además formé mi familia, algo más que determinante‘‘ manifestó entusiasmado el carismático ex jugador y actual entrenador de Cune.
Su andar por las calles de la ciudad y en los entrenamientos causaba sensación. ‘‘La adaptación no me costó mucho, es que residía en una ciudad chica y llegué a jugar en Holanda. Lo que me costó fue el tema del idioma, pero por suerte en las prácticas tuve el acompañamiento de Varisco y Claudio Escalada, quienes vivieron en Estados Unidos y manejaban a la perfección el inglés. Me facilitaron la comunicación con mis compañeros.
La contratación de extranjeros dio lugar a cambios estructurales en el básquet argentino. ‘‘No estoy en contra de la Liga Nacional, pero nosotros fuimos determinantes para los primeros pasos del gran cambio que se dio. El mismo público se entusiamaba, los jugadores entrenaban con gran contracción y en los chicos se incrementó el entusiasmo por la práctica.‘‘
El marco era multitudinario en cada escenario de los partidos con cada equipo reforzado que hacían noches memorables. ‘‘Es cierto que la gente respondía con su presencia, tenía una enorme expectativa y mostraba interés en cada fecha, todo lo contrario a la actualidad. Es que antes existía la atracción y eso se debe ofrecer al público de Chaco que se caracteriza por ser muy exitista. La mejor prueba es que cuando se juegan partidos de Liga Nacional o se presenta la selección existe buena respuesta”.
Siempre existió rivalidad entre capital e interior, hoy los equipos de Charata y de Villa Angela marcan la supremacía participando en las más importantes categorías a nivel nacional. ‘‘Esto obedece a los cambios dados, antes existían en los clubes jugadores de gran altura de 2,05, hoy ya no es así, y el interior mejoró sustancialmente su nivel porque los equipos entrenan de lunes a viernes y juegan los sábados. Todo lo contrario a Resistencia donde siempre se entrenó y se compitió de lunes a lunes en todas las categorías. El otro factor del crecimiento del interior se relaciona con el económico porque los dirigentes son empresarios, hacen aportes y facilitan las campañas. En cambio en Resistencia no se da la misma manera y carece de una política deportiva. Hay demasiados problemas sociales, pero dentro de ese panorama hay que darles un lugar a los chicos en los playones o en las pistas para que practiquen deportes en los barrios, y sean contenidos ante el avance de la drogadicción y del alcoholismo”.
Steve Washington es un personaje de la ciudad que se ganó el afecto de los resistencianos. ‘‘Me siento chaqueño, más allá de que tengo una mezcla a la hora de hablar, sólo tengo palabras de agradecimiento para la gente de todos los clubes en los que jugué porque siempre me recibieron con los brazos abiertos y jamás tuve problemas en ningún lado. Es un hecho imborrable en mi vida la llegada a Villa, mi participación en Cosecha, el ascenso al TNA logrado con Sokol, me marcaron a fuego estas campañas por las experiencias. Siempre tengo presente y estaré eternamente agradecido a señores como Ricardo Siri, los hermanos Toledo, Jorge Varisco, Atilio Velázquez, familia Escalada, la subcomisión de Básquet de Villa, y los directivos de las demás entidades que me contrataron”.
Sobre el final reconoció que ‘‘mi vida va a terminar acá, estoy arraigado con mi familia, y además seguiré desarrollando mi proyecto en Cune que lleva doce años alcanzando un reconocimiento incluso a nivel país, principalmente con el mini. Estamos en franco crecimiento en todas las categorías”.